NL analizan proyecto para traer agua desde el Río Pánuco

  • Se está analizando la construcción del ‘Acueducto Noroeste´, que contempla traer agua desde el río Pánuco a Nuevo León

Rubén Muñoz, presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento en la Cámara de Diputados, aseguró que se está analizando la construcción del “Acueducto Noroeste”, que contempla traer agua desde el río Pánuco a Nuevo León, como posible solución a la falta de agua en el noreste del país.

Una solución que hoy nos han presentado en la Comisión de recursos hidráulicos es la realización del Acueducto Noroeste que tiene en la zona de reventadero en el Pánuco», dijo el legislador federal de Morena.

Una propuesta para que el 20 por ciento de las aguas, es decir no afectaría, la totalidad de los flujos, puedan mandar agua a las presas no solamente de Nuevo León, resolver el problema por 300 años de la zona metropolitana, sino también darle agua a la zona hidroagrícola de Tamaulipas», agregó durante una entrevista en la emisión matutina de ABC Noticias que se transmite en el 91.7 de FM.

Asegura que el proyecto es diferente al Monterrey VI, impulsado por el ex gobernador Rodrigo Medina, el cual, según el legislador, presentaba una serie de complicaciones técnicas que lo hicieron inviable, ya que afectaba a una zona agrícola en San Luis y en el sur de Tamaulipas.

Rubén Muñoz pidió a los gobernadores del noreste que trabajen en un proyecto ejecutivo encaminado a hacer realidad este acueducto.

La solución es sí traer agua del Pánuco, poder resolver el problema no solamente de la zona metropolitana sino trabajar los tres estado del país, que son Tamaulipas, Coahuila y Nuevo León, armar un plan de gran visión a 15 años y comenzar ya a trabajar en el proyecto ejecutivo de este gran plan de traer agua del Pánuco a través del proyecto Acueducto del Noroeste», agregó.

Durante la administración del priísta Rodrigo Medina, se anunció la construcción del Monterrey VI, que consistía en traer agua del río Pánuco. Sin embargo, al término de su administración, la obra fue frenada por el ex gobernador Jaime Rodríguez, obedeciendo a una promesa de campaña y ante el reclamo de activistas y políticos de oposición, debido al alto costo de la obra y el nivel de endeudamiento que le dejarían al estado.

Además, el proyecto estaba ligado al grupo Higa, considerado como una de las constructoras ‘favoritas’ durante la administración del presidente Enrique Peña Nieto.