Abaten a dos presuntos sicarios tras bloqueos en Matamoros y Reynosa

  • La Secretaría Seguridad Pública detectó un convoy de gente armada procedente de Matamoros

Los bloqueos registrados en los municipios de Matamoros y Reynosa, así como la presencia de grupos armados en San Fernando y Cruillas dejó como resultado la muerte de dos presuntos sicarios y el aseguramiento de vehículos y armamento.

La Secretaría Seguridad Pública informó que a las seis de la mañana del domingo las cámaras de seguridad detectaron un convoy de gente armada procedente de Matamoros con destino a San Fernando.

Las autoridades hicieron coordinación entre oficiales estatales, fuerzas especiales del estado , guardia nacional y ejército mexicano.

En la cabecera municipal de San Fernando y de Cruillas las autoridades detectaron a la gente armada por lo que se produjeron enfrentamientos.

En San Fernando se registraron dos muertes, un hombre y una mujer que presuntamente servían para una fracción del crimen organizado.

En el municipio vecino de Méndez, pistoleros a bordo de una camioneta Rover Ranger dispararon contra el grupo especial por lo que al retroceder terminaron por volcarse en el camino y quedar entre el monte.

Tres individuos alcanzaron a escapar mientras que una mujer quedó herida en el interior.

Además de ella encontraron armamento.

También en Cruillas los oficiales encontraron abandonada una camioneta con impactos de bala, ponchada y dentro un chaleco, cargadores y cartuchos.

Se registraron cuatro narcobloqueos en la ciudades de Matamoros así como dos en Reynosa pero tras la intervención de los militares se desactivaron.

Funcionarios municipales de Cruillas, Burgos y San Fernando decidieron suspender el evento para festejar el día del niño.

Por su parte, la octava zona militar informó qué elementos del octavo regimiento de caballería hicieron el aseguramiento de seis vehículos, de los cuales, dos tienen blindaje artesanal.

También se hizo el aseguramiento de un arma, cargadores, cartuchos además de ponchallantas.

La incursión de estos grupos armados obedece a una división entre facciones de Matamoros y San Fernando, luego de qué este último decidió unirse a Reynosa y a presuntas células del Cártel de Jalisco Nueva Generación.