Jugos para la hepatitis

La hepatitis es una inflamación del hígado, órgano que desempeña varias funciones vitales .El hígado no sólo produce bilis para ayudar a digerir las grasas.

Igualmente almacena nutrientes y filtra las sustancias tóxicas (como el alcohol y otras drogas y los productos secundarios digestivos) fuera de la sangre. El hígado produce las proteínas en la sangre que permiten la coagulación normal.

La hepatitis daña las células del hígado. Como resultado, el hígado no puede hacer su trabajo de filtración en forma adecuada y las toxinas se acumulan.

La enfermedad puede presentarse de pronto y durar unas semanas (hepatitis aguda) o persistir varios meses o incluso años (hepatitis crónica). Quizá no sepa que está infectado, porque los síntomas pueden no aparecer en años.

La hepatitis suele ser causada por un virus. Hay cinco virus diferentes de la hepatitis, pero los más comunes son hepatitis A, B y C.

La hepatitis A (el tipo más común) se desarrolla cuando come alimentos o bebe agua contaminados con heces. Esto ocurre cuando quien prepara la comida no sigue las prácticas sanitarias adecuadas, como lavarse las manos luego de ir al baño y antes de preparar la comida. La infección también es causada por comer mariscos contaminados crudos o mal cocidos, frutas y verduras contaminadas, y agua o cubos de hielo contaminados.

Una vez infectado con hepatitis A, puede transmitirla a los demás por un período que varía de una semana a más de un mes. Si está infectado, debe ser escrupuloso con la higiene, porque puede contagiar a los demás si están al contacto con sangre o heces viajar ai extranjero. La recuperación suele ser rápida; la mayoría de la gente se cura en una semana y no tiene daño permanente en el hígado.

La hepatitis B se transmite a través de la sangre y otros fluidos del cuerpo infectados, incluyendo el semen. Puede contraerla a través del sexo sin protección y agujas o transfusiones de sangre infectadas. A diferencia de la hepatitis A, este virus puede convertirse en una infección crónica (en el 10% de la gente), lo que causa enfermedad hepática y cáncer de hígado.

La hepatitis C se contagia a través de sangre infectada, por transfusiones efectuadas antes de 1991 (cuando se empezó a analizar la sangre para hepatitis C) o por agujas contaminadas. Los médicos no están seguros de si la hepatitis C puede transmitirse durante la relación sexual, pero recomiendan el uso del condón para mayor seguridad. Este virus afecta en una variedad de formas. Algunos desarrollan una forma aguda de hepatitis, pero se recuperan en varios meses, sin insuficiencia hepática. Hasta 60% de los infectados con hepatitis C llegan a tener hepatitis crónica. Algunos desarrollan insuficiencia hepática y cáncer de hígado.

La hepatitis puede ser también por causas no virales, como algunas enfermedades autoinmunes, consumo excesivo de alcohol, ciertos medicamentos y toxinas (arsénico u hongos venenosos).

El alcohol envenena el hígado y, con el tiempo, provoca cirrosis (cicatrización), que es irreversible. Los medicamentos que pueden causar insuficiencia hepática incluyen el antibiótico co-trimoxazola (Septrin y Bactrim), el medicamento para el corazón amiodarona (Cordarone), el medicamento para la tuberculosis isoniazida y los esteroides anabólicos (en sobredosis). Sin embargo, hable con el médico antes de dejar de tomar cualquier fármaco.

Otra causa de hepatitis es el analgésico paracetamol. Si se toma en sobre-dosis (más de 20 pildoras) o con alcohol, el paracetamol puede causar hepatitis repentina y grave, y muerte súbita si no se trata de inmediato.

Algunas personas infectadas con un virus de hepatitis no presentan síntomas o éstos son tan leves que no los notan. En otros casos, el trastorno puede resultar mortal. Si la hepatitis se debe a una infección viral, el período entre la infección y la aparición de los síntomas puede variar de seis semanas en la hepatitis A a seis meses en la hepatitis B. Algunas personas  no presentan síntomas pueden convertirse en portadores del virus.

Si hay síntomas, al principio pueden incluir:

Fatiga y sensación de malestar

Falta de apetito

Náuseas y vómitos

Molestias en el costado superior derecho del abdomen.

Varios días después de la aparición de los primeros síntomas, la parte blanca ele los ojos y la piel pueden tornarse amarillentas (ictericia). A menudo, los síntomas iniciales aumentan cuando aparece la ictericia.

En esta etapa, las deposiciones pueden ser más pálidas que lo normal y aparecer prurito.

La hepatitis aguda causada por el virus de la hepatitis B puede provocar además dolor en las articulaciones.

La hepatitis aguda grave puede causar insuficiencia hepática, provocando confusión mental, convulsiones y, a veces, coma. La insuficiencia hepática es relativamente común después de una sobredosis de paracetamol. Pero es menos común con algunos tipos de hepatitis, como aquellos provocados por el virus de la hepatitis A.

Jugo para la hepatitis 1

Ingredientes

1 naranja

2 zanahorias

1 trozo de raíz de jengibre de 1 cm

1 manzana

Preparación

En la licuadora, extraer el zumo de la naranja, las zanahorias, el jengibre y la manzana. Revolver y servir en un vaso. Tomar a diario hasta superar la enfermedad.

Jugo para la hepatitis 2

Ingredientes

1 manojo de endibias

1 manojo de espinacas frescas

2 zanahorias

Preparación

En la licuadora, extraer el zumo de las endibias, las espinacas y las zanahorias.Tomar este jugo a diario hasta superar la enfermedad.

Jugo para la hepatitis 3

Ingredientes

1 trozo raíz fresca de diente de león de 10 cm 1

2 zanahorias

1 manzana

Preparación

En la licuadora, extraer el zumo del diente de león, las zanahorias y la manzana. Revolver y servir en un vaso grande o en dos menores. Tomar a diario hasta superar la enfermedad.

Otros remedios naturales

Remedio para la hepatitis 1: Hervir durante 12 minutos en 1 litro de agua 50 g de raíz de lampazo mayor y 30 g de raíz de espino albar.  Colar y verter sobre  30 g de alcachofa Tapar y dejar en infusión durante 20 minutos, colar, distribuir en 6 partes a tomar durante 3 días, a razón de 2 veces diarias, 6 días a la semana, durante 3 semanas, es decir, 18 días en total.

Remedio para la hepatitis 2: Hervir para reducir de 2 litros a 1 litro 100 g de hojas de llantén mayor y 50 g de flores de maravilla. Colar y verter sobre 30 g de corteza de arraclán. Tapar y dejar en infusión durante 1/2 hora, colar y distribuir en 8 partes que se tomarán durante 4 días, a razón de 2 veces diarias, 4 días a la semana, durante 5 semanas seguidas, es decir, 20 en total.

Remedio para la hepatitis 3: Hervir a fuego medio en una cazuela de material no reactivo 1 cucharada de raíz de diente de león y 2 tazones de agua. Cubrir la cazuela, bajar el fuego y dejar cocer a fuego lento 20 minutos. Poner 1 cucharadita de manzanilla frescas y 1 cucharadita de semillas de hinojo en una tetera de cerámica. Verter el agua caliente con diente de león sobre las plantas, colando el diente de león, y dejar reposar 5 minutos. Beber caliente, o dejar enfriar a temperatura ambiente.

Recomendaciones preventivas

Cocinar adecuadamente: Cueza muy bien todos los alimentos, en especial los mariscos, para matar el virus de la hepatitis.

Lavar y pelas las frutas y verduras importadas de países donde las condiciones sanitarias sean malas. Con sólo lavarlas no retira el virus de la hepatitis A, así que es mejor quitar la cáscara. Por seguridad, evite las ensaladas.

Consumir agua embotellada: Cuando viaje al extranjero, compre agua embotellada o asegúrese de que el agua de la llave esté hervida antes de bebería o de usarla para lavarse los dientes. Es mejor pedir las bebidas sin hielo.

Lavar las manos con jabón y agua caliente antes de preparar la comida y después de ir al baño y de cambiar pañales, para ayudar a prevenir la propagación de la infección.

Tener cuidado con las agujas: Las agujas contaminadas contagian la hepatitis A y B. Los tatuajes y perforaciones corporales sólo deben hacerse con agujas esterilizadas y desechables.

No compartir el rastrillo ni el cepillo de dientes con alguien infectado con hepatitis B o C, porque el virus se contagia a través de la sangre y los fluidos corporales, y se transmite con mucha facilidad.

Recomendaciones cuando se tiene hepatitis

Tomar precauciones para evitar el contagio de la enfermedad, incluida la práctica de relaciones sexuales seguras si se tiene hepatitis viral.

Evitar beber alcohol durante la enfermedad y durante, al menos, tres meses después de recuperarse. Sin embargo, si la causa se relacionó con el alcohol, se le aconsejará que lo deje.