Viven saturación, albergues en Tijuana

• Pese a la saturación de los albergues que operan en esta frontera, personal de la subsecretaría de Asuntos Migratorios de gobierno de Baja California, en coordinación con el Instituto Nacional de Migración, trasladaron a connacionales y extranjeros que ya se habían instalado en campamentos ubicados en la vía pública

TIJUANA.

Pese a la saturación de los albergues que operan en esta frontera, personal de la subsecretaría de Asuntos Migratorios de gobierno de Baja California, en coordinación con el Instituto Nacional de Migración, trasladaron a connacionales y extranjeros que ya se habían instalado en campamentos ubicados en la vía pública.

El traslado de migrantes tuvo por finalidad alojarlos en los diferentes refugios de esta ciudad fronteriza, ya que pernoctaban a las afueras de los albergues en espera de un espacio.

Al respecto, coordinadores de los albergues como el pastor Albert Rivera, del Ágape o José María García, del Juventud 2000 precisaron que fueron trasladados alrededor de unos 30 migrantes de cada uno de estos espacios, principalmente connacionales provenientes de Michoacán y Guerrero, estados presa de la violencia, y de Honduras y El Salvador, países que enfrentan el mismo flagelo.

Sin embargo, en ambos albergues que operan en la frontera se han registrado amenazas en contra de los migrantes por lo que sus coordinadores han pedido apoyo a las autoridades ya que han sido blanco de disparo al aire y hasta de advertencias de que les prenderán fuego con todo y hombres, mujeres y niños dentro.

Cabe destacar que apenas el pasado 9 de septiembre, narcotraficantes que operan en la zona de tolerancia donde se ubica el albergue Juventud 2000 amenazaron con incendiar el recinto donde más de 200 mexicanos y extranjeros pernoctan por lo que desde entonces dormían en las calles.

En tanto Albert Rivera aseveró que grupos delictivos han disparado contra el albergue Ágape que él dirige y que policías estatales han ingresado al citado espacio lo que provoca temor entre los refugiados.

Junto con migrantes que aspiran a cruzar a Estados Unidos o que están a la espera de una cita de juicio político o humanitaria también conviven mexicanos deportados por las autoridades migratorias estadounidenses.

Cada día, Estados Unidos expulsa a esta frontera de los 60 a los 100 migrantes, que no regresas a sus lugares de origen.