Llanto y risas de Simone Biles; la gimnasta más condecorada

  • La estadunidense Simone Biles se le salieron las lágrimas tras tener la medalla de oro en su cuello. Superó la adversidad y regresó de gran forma

Simone Biles superó la adversidad, se sobrepuso a temas de salud mental en los Juegos Olímpicos de Tokio. Hizo una pausa de dos años y tuvo un regreso triunfal en los Campeonatos del mundo de gimnasia en Amberes. En el podio, la medalla de oro de este viernes le provocó llanto, pero a la vez risas.

En Amberes consiguió su título mundial número 21 al ganar el concurso general con 58,399 puntos, quitándole el cetro a la brasileña Rebeca Andrade (56,766), que defendía el título.

Simone Biles en lágrimas
Con su título de este viernes, Simone Biles se convirtió en la gimnasta más condecorada de la historia con 34 preseas.

Previo a la premiación, la estadunidense disfrutó el momento con sus compañeras. Ya en el podio y con la medalla de oro en el cuello, rompió en llanto, momento que captaron los fotógrafos y las cámaras de televisión.

“¿Quién está cortando cebollas?”, publicó la cuenta de USA Gymnastics.

Ya considerada como la ‘GOAT (‘Greatest of all time’, la mejor de todos los tiempos) al inicio de los Juegos Olímpicos de Tokio de 2021, Simone Biles, reina de las acrobacias, emocionó al mundo del deporte al mostrar sus problemas de salud física y mental en la cita nipona.

Lastrada por ‘twisties’, un término que alude al bloqueo mental que suscita la pérdida de orientación espacial, renunció a varias pruebas antes de conquistar con gran valentía una medalla de bronce en viga equilibrio.

Su transparencia sobre el tema abrió el debate sobre el hasta entonces tema tabú de la salud mental en el deporte de alto nivel.

Con sólo 26 años, Simone Biles, que explicó que sigue en terapia psicológica, ha regresado en varias ocasiones de las cenizas.

Desde su difícil infancia, la gimnasta ha saltado sobre numerosos obstáculos hasta convertirse en una poderosa voz contra los abusos en el deporte y ha asumido sin complejos su dimensión histórica como atleta.

Simone Biles luciendo la medalla de oro
Nacida en 1997 en Columbus (Ohio), la pequeña Simone y sus tres hermanos tuvieron que ser enviados a un centro de acogida ante los problemas de alcohol y drogas de su madre, quien pasó temporadas en la cárcel.

«Nunca pude contar con mi madre biológica. Recuerdo que siempre tenía hambre, miedo», relató la gimnasta en una entrevista televisiva en 2017.

«Mis abuelos me salvaron», afirmó sobre Nellie y Ron Biles, a quienes considera sus padres y que cambiaron el destino de su vida, adoptándola junto a su hermana pequeña, mientras los otros dos fueron recibidos por otros miembros de la familia.