PRIISTAS VERACRUZANOS EN CONTRA DE DIRIGENTES NACIONALES DE SU PARTIDO

  • La repostería de Xalapa está de luto, por la partida al viaje sin retorno, de una de sus pioneras más distinguidas y exitosas de esta industria, la señora Palmeros

60 SEGUNDOS

RAUL GONZALEZ RIVERA

PRIISTAS VERACRUZANOS EN CONTRA DE DIRIGENTES NACIONALES DE SU PARTIDO

Se cuenta en corrillos que los socios priistas veracruzanos, no coinciden en que la dirigencia nacional siga estando en manos de los mismos, que cayeron en el 2018 y en el proceso electoral celebrado este año, hayan sucumbido ante el empuje del resto de membretes partidarios.

                Por supuesto, que la familia tricolor del presente, está que truena contra la dirigencia burocrática que rige los destinos del partido en retirada nacionalmente. Generalmente tras la realización de un proceso que evidencia las graves fallas en que incurrió el ex partido aplanadora, justo es que la renovación de su directiva nacional, las estatales y hasta las municipales abandonen el barco.

                Cierto es que el sistema de partidos políticos en México, atraviesa por una severa crisis de credibilidad y ascendiente en alguno de los sectores sociales de la población azteca. Su fuerza como tales quedó en el pasado y sus liderazgos, justo es decirlo, difícilmente tienen o cuentan con el poderío que por casi 80 años, por ejemplo, mantuvo el ex partidazo de don Plutarco Elías Calles. 

                En el caso de los socios priistas veracruzanos, se impone como un caso sui-géneris, debido a que dicha catapulta de influencia partidaria, surgió a la vida pública hace 40 años, ya que antes, por sistema o método, los ciudadanos  se regían por la dirigencia de un solo partido, hegemónico, al cual la sociedad estaba acostumbrado a ojos cerrados y de alguna manera los políticos que emanaban de sus trincheras, igual, eran considerados justamente como los indicados para cubrir las diferentes etapa de la vida pública de la entidad.

                Los amagos del hambre, la desocupación laboral, las crisis que después invocarían los gobiernos sucesivos del régimen priista, no contaban porque el grueso de la población estatal, era medianamente feliz, gozaba de paz social, tranquilidad y realizaba su existencia con la cotidianidad que le imponía un estado de cosas bajo algún control.

                Las cuestiones partidarias, poco importaban a las aplastantes mayorías. Con la sucesión de los gobiernos priistas a partir de los años 80-90. Sobrevino la inconformidad de los ciudadanos, la cual se habría de rebelar o mostrar como tal, con los priistas que poco a poco renunciaban a las filas de su ex partido aplanadora. El caso más significativo, sin duda, el representado por el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.

                Por supuesto, la hecatombe sobrevendría años más tarde, con el desmembramiento del priismo en el orden nacional.

                En Veracruz, no fue menos. Sin embargo, el grupo que buscaba su eternización, alcanzó los 40 y quizá 50 años de gozar de las mieles que les heredaba el uso del poder. La entidad empobreció y las numerosas familias de ciudadanos, quedarían a la deriva del desarrollo que solo se citaba en el discurso de los políticos. Los hombres que saquearon la entidad, no se percataron que su escuelita de cuadros ni siquiera abrió puertas jamás.

 Así que las consecuencias serían funestas para el grueso de la ciudadanía. Se cuenta con un estado rico pero repleto de pobres y ahora los socios priistas, desde la penumbra lanzan gritos de protesta porque el priismo nacionalmente padece de líderes que solo buscan su perpetuidad en sus cargos, cuando estamos en el umbral del cambio que reclama el siglo XXI. Esperemos.

AUNQUE NO LO CREA, EL PANTEÓN ANTIGUO, FUE OLVIDADO DURANTE LA FIESTA DE MUERTOS

Siempre hay una primera vez, así que el panteón antiguo quedó como la vieja fotografía en blanco y negro, sin expectativas ni oficio que le mereciera el menor de los arreglos, pues la maleza lo mantuvo bajo sepultura los días de muertos, no obstante que hubo los deudos de difuntos que siguen descansando en las criptas y mausoleos, allí en el recinto sagrado que se localiza en el crucero que conforman la avenida 20 de Noviembre y la calle 5 de Febrero.

Centenares de mininos y el cantar de los grillos, fueron avistados y escuchados, una vez que entraban las primeras horas de las tardes-noches.

Seguramente ni el pedagogo Enrique C. Rébsamen ni el industrial don Justo Fernández, se quejarían si lo saben o supieron del abandono patético de sus tumbas, colocadas a mitad del panteón, así como de otros tantos y distinguidos xalapeños, cuyos restos, allí fueron depositados por sus demás familiares. Deudos, algunos de ellos, que arribaron también al panteón con la intención de rendir justo homenaje póstumo a sus difuntos, pero se encontrarían que el total de sus tumbas, estaban copadas de maleza infame.

La falta de respeto a los ilustres difuntos, seguramente en ningún momento conmovió a los ediles que usted quiera responsabilizar de este criminal olvido. Cierto es que desde los días en que gobernó a la entidad, el economista Agustín Acosta Lagunes, el panteón pasó de alguna forma al ostracismo, ya que se pretendió en aquel sexenio demolerlo y convertirlo en un parque público para la recreación de las familias xalapeñas.

Afortunadamente, los vecinos del rumbo y deudos de difuntos que allí se encontraban depositados sus restos lo impidieron con sendas protestas públicas y reclamos a través de las páginas de los periódicos de la época. Al alcalde Ignacio González Rebolledo, la gente habría responsabilizado de la intentona con echarlo abajo, pero igual, se sumó como edil al sentir de las mayorías y se evitó el atentado.

En dicho panteón, todavía permanecen decenas de mausoleos y criptas, que en este año lamentablemente ninguna autoridad podó, limpió ni cuidó su jardinería y pasillos, históricos como se sabe que son, debido a que una gran mayoría de sepulturas en dicho panteón, conservan los restos de personajes que lucieron en los siglos XIX y XX en las diferentes áreas de las ciencias, las artes y la historia y por supuesto, la pedagogía.

Con la maleza y basura, cubriendo el casi  total de los interiores del panteón antiguo, también los vecinos del rumbo, han colocado letreritos en los pórticos de sus  viviendas y ventanales, en tono de alerta, contra el mosquito transmisor del dengue principalmente, debido a que en las criptas y mausoleos, igual se anidan millones de larvas de aquellos, lo que les mantiene  con el  Jesús en os labios, sobre todo a las familias antiguas, que habitan en las calles de Landero y Coss, 5 de Febrero y la avenida 20 de Noviembre. Al tiempo.

UN CALVARIO PARA LOS ALCALDES QUE SE VAN, PORQUE LAS CUENTAS NO LES SALEN BIEN

Sin duda, a estas alturas, las instancias del poder encargadas de recibir querellas y proceder a la investigación de sus cuentas y cuentos, colocan a los alcaldes salientes contra la pared y a otros con la amenaza de que la picota, pudiera caerles sobre sus cabezas.

En qué fallaron los ediles municipales, que como nunca el listado de quienes podrían pasar a tener que pagar con su propia libertad los excesos, abusos, incumplimientos y otras cuitas que van apareciendo en la vida de los personajes que por espacio de tres años, administraron la vida pública de alguno de los ayuntamientos municipales.

Si el presupuesto, no les alcanzó, lo menos que debieron haber informado en su oportunidad, es precisamente que ignoraron el caminito que los llevara ante quien se debía, para descargar sus lamentos y exigencias y necesidades insatisfechas, a sus representados popular y legalmente, y que ahora les pueden explotar en sus manos.

Es cierto, que al menos en las municipalidades más importantes, sus alcaldes suelen embolsarse cuantiosos recursos monetarios y, por otro lado, acrecentar sus patrimonios personales y familiares, con la adquisición de bienes inmuebles, como jamás lo habrían podido hacer, desde las trincheras laborales en la vida privada o el ejercicio llano de sus profesiones.

En el café, como antaño, todavía entre los comensales, se apuesta inclusive, cuáles personajes edilicios se cargaron con recursos millonarios y pudieron enriquecer su alforjas con nuevas viviendas, terrenos, ranchos y otros beneficios, que les dio la oportunidad de alcanzar tan solo con tres años de ejercer el que debiera ser el más completo de los servicios que puede prestarse a una sociedad, sedienta de justicia, paz social y ajena de la constante de los excesos y abusos que cometieron sus cuerpos policiacos y los noveles agentes de la policía vial, caso sonadísimo sobre todo en numerosas municipalidades, incluida  la ciudad capital del estado de Veracruz.

Cabe destacar a estas últimas, por su abandono y la inseguridad pública. Pocos municipios se distinguieron de no incurrir en las viciadas prácticas, que les llevaron a padecer en los últimos trienios, como en un pasado derivado del desdén e importa-madrismo en que incurrieron sus alcaldes, los cuales lucieron por la ineptitud a la hora de ejercer su encargo, y la demagogia empleada en detrimento de un pueblo conformado por más pobres, menos iletrados, numerosos desempleados, pero no tontos ni tarados.

Hay quienes aseguran que los pueblos menos abandonados, con alguna transformación en su imagen, son contaditos. Diez a lo sumo. Va de cuento, pero se salvarían Veracruz, puerto; Boca del Río, Córdoba, San Andrés Tuxtla, y un primerísimo lugar se lo otorgan analistas y observadores al ayuntamiento de  Orizaba, cuyo alcalde por tercera vez, el señor Diez, obtiene 10 de calificación, porque transformó a la chayotera ciudad de tal manera, que sería quien impusiera el ejemplo de haber sido y se confía, que sea, desde ahora el alcalde más distinguido de cuantos haya registrado la historia contemporánea de la región centro y el resto de la entidad, en los últimos cien años. Es todo.