REVELACIONES

Musa Peregrina

Por las noches camino desiertos que desangran angustias y vomitan semillas secas desde mis entrañas fragmentadas a medio verso.

Entre fracaso y fracaso el tiempo acaricia con odio la soledad de mis dedos inquietos que buscan con avidez tu ritmo ausente.

Mi almohada lamenta haber sembrado absurdas obsesiones en los ríos que escurren de mi entrepierna.

He sido selva castrada en el recóndito de mi creación, he mutado la redención de los árboles, fieles guardianes del oxígeno que se anida en el verde frondoso de mi silueta metafórica.

Me reconozco nube abstracta y pecaminosa poesía que brota en la primavera de aquellos sentimientos floridos, en el inconsciente de mis amores vanos.

Al amanecer, renazco en lluvia árida y olvido la abstinencia arando pasiones al unísono de los vientos, vivo enamorada de sórdida ausencia que esculpe primitivos andares entre mis sendas.

Soy hembra perseguida por rapaces infiernos, descifrando oscuras grietas escondidas a espaldas de un miedo voraz que me atormenta.

Al final del día suelo ser una gata mimosa que mira tejados distantes y restriega su lomo en pupilas anónimas, en búsqueda de una aventura interminable que me devuelva el hambre de vivir…