Santorini, de Vivián Sánchez Barajas, una isla del verano

  • Página Nómada

SÁNCHEZ BARAJAS, Vivian, Santorini, Editorial Nieve de Chamoy, 2020,  Colección: Bajo cero, Edición: Mónica Braun, Diseño: Guillermo Serrano: Desarrollo de Ebook: Ricardo gallardo. (142 pp.)

Por Eduardo Cerecedo

Santorini es un poemario, palabra cuyo significado es la isla más bella de lava antigua,  de Théra, es decir, un volcán; de esta manera, el referente en el libro, según  la poeta, es ese paralelismo entre, el que escribe, respecto a sus cualidades físicas, carnales, y espirituales en esa circunferencia entre carne, erotismo y entrega. También quiero expresar, que éste, es un libro que conozco a través de la pantalla, es decir,  pdf, por motivos distintos a los tiempos actuales, pero aquí lo que vi, lo que encontré, lo que intuí, lo presento.

Porque el poema, la obra de arte, mientras más significados ostenten en su manera de interpretar, mayor es la dicha, el gusto y el placer de los lectores.

     Santorini, es para la poeta, una isla de los mares griegos, una de tantas que ella eligió para darnos a conocer su discurso poético. Ya la voz que da cuenta del instante, ese tiempo a veces circunstancial, a veces buscado, es el vínculo entre el lenguaje y la parte geográfica de la poesía de esta autora, que, estoy seguro a más de alguien lo ha encantado con esa manera de ver el amor, la entrega. Su visón del amor total, está en esta cesión de poesía, que se suma a esa búsqueda del gozo, de la participación de la memoria, el invento.

    Así, Santorini es una isla del deseo, donde los versos, los poemas tienen algo de viaje, algo de realidad, pero a la vez, algo de sueño, de invención. En que el erotismo rayando en los bordes del verso porno establece esa actitud de visualizar el cuerpo como el factor de dicha para la entrega al placer. Así pues, la voz de quien escribe se vuelve historia versada, para que la locución encuentre ese ritmo de las cosas nombradas que se vuelvan sólidas también en lo que ella nombra de los personajes que la acompañan en esta odisea poética. Con un lenguaje próximo a la prosa, sin ser prosa se manifiesta en tiempo y orden de la acontecimiento verbal, que es sinónimo de encuentro. Así los nombres Mikonos, Crhistos, Pireo, Apolo, Théra, Afrodita, Egeo, así como las frases en inglés, se entretejen en la obra, que le confieren y le dan un aire fresco al idioma español aduciendo de manera paralela a un país, a una lengua y a una geografía que la poeta ha instalado en su voz, para, de ahí, partir al sentimiento, que tiene una vía al amor, a la sesión de escenas, escenarios en que el cuerpo halla lo que la mente le pone como ofrenda, la carne, el cuerpo de su contrario para hallar el traspaso del amor al deseo. Así la pasión se ve, se siente sistémica en un tiempo, que el verano se amplia para reposar, pulsar ese viaje coronado en el deleite de satisfacción sin medida, porque se encuentra lo carnal con lo espiritual que la poeta sella con su palabra. Así se retiene el tiempo, pero a la vez le da la posibilidad de partir, nada de inmovilizar al personaje aludido en cada encuentro donde la palabra amante desborda el momento preciso de lo terrenal frente a la atmósfera cotidiana.

Si la poesía es aquello que se cautiva con las palabras, el encanto del instante, o dicho de otro modo, a la manera de los griegos,  ”La poesía es el arte superior de hablar de los hombres”, donde el espíritu alcanza el ritmo, la imagen, la emotividad en el acomodo de las palabras cuyo lenguaje literario alcanza ese momento de hechizo. Para Vivian Sánchez Barajas, la poesía es un bien para salir en esa búsqueda del tiempo enmarcado en ese verano, en ese lapso de asueto, en el que las acciones se desarrollan como en las novelas, ejerciendo ese clímax justo para pasar al  desenlace justo, después de ese hecho amoroso, aquí en cada poema que se desdobla,  que sigue y continúa para hallar un pretexto en que el gozo es pleno en el yo de la poeta.  Finalizo esta nota con palabras de Ernesto cardenal al referirse a la poesía de nuestro tiempo, más bien a su poesía, señala: “ La poesía en la actualidad se divide en dos grandes tendencias, una, en que es una poesía abstracta, subjetiva, onírica, incomprensible; dos, en que es una poesía, objetiva, real, concreta, comprensible; de allí viene la poesía de él. Ahora como lectores, veamos en que circunstancia se halla la poesía de nuestra poeta nacida en Tecate, Baja California. Aquí mi opinión.